La instalación de buzones inteligentes en una comunidad de vecinos

La instalación de buzones inteligentes en una comunidad de vecinos

La instalación de buzones inteligentes en la comunidad de vecinos nace como una nueva necesidad con el auge del comercio electrónico.

En muchas ocasiones las personas no están en casa y se hace necesario un lugar donde el repartidor pueda dejar el envío en el edificio sin necesidad de molestar a otros vecinos.

Los tiempos ya han cambiado y la tendencia de la compra online sigue aumentando.

Con el auge del comercio electrónico, el número de paquetes que se envían al domicilio aumenta exponencialmente y los buzones tradicionales, por su tamaño y funcionalidad, sólo pueden recibir cartas o impresos.

La gente compra en línea porque se hace rápido y es cómodo fácil. Entonces, ¿para qué vamos perder el tiempo esperando a que el mensajero consiga entregar el paquete o incluso molestar a otro vecino?

¿Qué es un buzón inteligente?

Los buzones inteligentes son buzones multi-usuario, es decir, que lo pueden usar distintas personas (no a la misma vez pero sí cuando están vacíos)  donde se puede recibir el correo incluso cuando el destinatario no está en casa.

Se sitúan en un zona común de la comunidad que no moleste y el mensajero podrá en un buzón el paquete para que pueda ser recogido en cualquier momento.

Buzones inteligentes para comunidades de propietarios

Si tomamos como modelo una comunidad de 50 viviendas, cada semana se pueden gestionar hasta 150 paquetes. Si un paquete no se entrega directamente al destinatario, hay varios escenarios:

  • El paquete se queda sin entregar. Normalmente, el vecino tiene que ir al almacén de la empresa de paquetería u oficina. Esto no sólo supone un inconveniente para el destinatario (que no recibe el paquete), sino que también genera costes adicionales a la empresa de paquetería (que al final se trasladan al consumidor). Y lo que es más importante, los paquetes no entregados en la comunidad tienen un impacto medioambiental ya que el repartidor tiene que hacer más viajes para hacer el correcto reparto y que puede evitarse fácilmente utilizando buzones inteligentes.
  • Los paquetes se dejan en buzones vigilados o en la garita del portero. Esto sólo es válido en comunidades que disponen de conserje (cada vez más escasos en España). Además, no podemos suponer que la garita del portero sea un almacén: sobre todo en comunidades grandes, puede haber una acumulación de pedidos. De hecho, el estar recogiendo paquetes le hace perder tiempo y si tiene asignadas más tareas en la finca, el tema de acumular los pedidos le quitará tiempo para hacer otras cosas.
  • Los paquetes se entregan en un buzón inteligente. Esta opción permite a los vecinos recibir los pedidos incluso cuando no están en casa, lo que ahorra viajes innecesarios al almacén y/o tiempo, distancia de seguridad en caso de pandemias y ahorro de viajes al transportista o que impacta positivamente en el medio ambiente al reducir los viajes.

¿Cómo funcionan los buzones inteligentes?

El funcionamiento es sencillo e intuitivo. Además, las empresas que operan hoy en día en el mercado no cobran nada a los clientes por utilizar los buzones. Incluso el mantenimiento de los buzones es gratuito.

Una vez instalados, hay que activarlos mediante una app móvil de la compañía. A partir de ese momento, estarán listos para su uso, tanto para la recogida como para la devolución.

Si te preguntas sobre la seguridad de este sistema, las compañías usan un sistema de última generación para que los paquetes estén protegidos y seguros.

Al instalar los buzones inteligentes se acabó lo de estar pendientes de un pedido o pedir un favor a alguien para que te lo recoja.

Requisitos para instalar buzones inteligentes en una comunidad de propietarios

Para la instalación debemos tener en cuenta los siguientes requisitos:

  • Para instalar un buzón, suele ser necesaria una zona común cubierta con acceso privado.
  • Depende la empresa, pero el edificio en el que se va a instalar el buzón debe tener un mínimo (10 residentes).
  • No es necesario poner un buzón a cada vecino. Como ya hemos dicho suelen ser buzones multiusuario, por lo que ocupan menos espacio.
  • La instalación, el uso y el mantenimiento son 100% gratuitos, por lo que el coste no corre a cargo de la comunidad de propietarios.
  • Si el buzón sufre algún daño, las compañías suelen tenerlos asegurados contra este tipo de daños u otros que puedan ser causados por el agua u otros factores externos.

¿Es necesaria autorización de la junta para la instalación? 

En principio sí, se necesita autorización de la junta para la instalación.

Con carácter general, para los casilleros generales u ordinarios, el art. 34 del RD 1829/1999 establece que en las viviendas unifamiliares, locales comerciales o industriales independientes, la prestación del servicio podrá hacerse en un buzón residencial situado cerca o sobre la primera puerta de entrada, para que permita la entrega desde una vía pública y deberá incluir el nombre y número de la calle u otros datos identificativos de la dirección postal.

Es decir, que un casillero común es obligatorio, siendo un elemento común relacionado con la correcta función del edificio y es obligatorio para la comunidad según el actual artículo 10.1.a) LPH. Y el coste de la instalación de un buzón entra en los artículos 10.1.a) y 9.1.e) de la LPH.

Para estos nuevos tipos de buzones inteligentes que se instalan en los portales en los que los vecinos pueden recibir sus compras en línea no son la instalación de un nuevo servicio de interés general, sino una adaptación del servicio de correo ya prestado para aprovecharlo y mejorarlo, redundando en beneficio de todos los propietarios.

No hay que olvidar que el artículo 3.1 CC establece la obligación de interpretar la ley a la luz de “la realidad social del tiempo en las normas deben aplicarse”, (lo que incluye el artículo 34); por tanto, estaríamos hablado de un sistema más de recepción de correo y paquetería para hacerlo más accesible.

En este caso, al tratarse de una adaptación o modificación de un servicio ya existente, no se trata de una creación desde cero y bastaría con adoptar un acuerdo mayoritario que será vinculante para todos los propietarios, de acuerdo con el artículo 10.1.a de la LPH.